manos pies piernas
débiles cual sueño triste
como un venado de alientos nebulosos a punto de morir de inanición
lilas atan mis huesos, soy de mimbre
cerebros frágiles de profundas ideas adormecen cuentos entre hilos despavoridos
de la hendidura de mis párpados salen los recuerdos como lágrimas de algodón
no quiero ser aquella que espera
soñaré fábulas
dormiré entre amapolas.
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